viernes, 7 de abril de 2006

Solución del Caso Clínico: Mycobacterium Marinum


Se realizón punción de las lesiones. El directo fue BAAR (+). Reinterrogando al paciente, refiere haber limpiado una pecera días antes de comenzar con las lesiones. El cultivo fue (+) para Mycobacterium Marinum.

Foto por gentileza de la Dra. Laura Boucai.

1 comentario:

Dr. José Antonio Valiente dijo...

El diagnóstico diferencial del "síndrome linfocutaneo " habitualmente incluye: sporotrichosis, Mycobacterium marinum, tularemia, leishmaniasis, y Nocardia.
M. marinum es una micobacteria foto cromógena, ácido alcohol resistente que habitualmente habita en reservorios acuosos. Fue inicialmente aislada como causa de tuberculosis en peces en 1926. En 1951, fue identificada en granulomas cutáneos en humanos luego de exponerse a medios acuosos. Tanto peces de agua salada, como de agua dulce, delfines, cangrejos, ostras, y caracoles son vectores comunes. El organismo es usualmente inoculado a través de la piel por e mínimos traumatismos. El periodo de incubación varia entre 2 y 3 semanas. La enfermedad clínica comienza con pequeñas pápulas. Estas más tardíamente se vuelven supurativas, y la infección ocasionalmente se disemina a través de los linfáticos eferentes semejando la esporotricosis.
El organismo es aislado en medio de Löwenstein-Jensen o Middlebrook 7H10 agar a 32ºC pero ocasionalmente crece a temperaturas de 37ºC. Otras micobacterias pueden crecer a 37ºC, por lo que para un aislamiento inicial es recomendable incubar las muestras clínicas a ambas temperaturas. La identificación habitualmente tarda entre 7 y 14 días.

Diagnóstico
La biopsia revela granulomas no caseosos, y organismos ácido alcohol resistentes en el 30% de los casos. El cultivo es el “gold standard ” para el diagnóstico definitivo.
M marinum es uniformemente resistente a isoniazida pero típicamente sensible a etambutol, rifampicina, ciprofloxacina, azitromicina, claritromicina, kanamicina, y amikacina. Minociclina, doxiciclina, y trimetoprima-sulfametoxazol han sido usados en monoterapia para infecciones superficiales, Pero la terapia combinada se prefiere en infecciones profundas. Dado que la combinación de claritromicina, etambutol, y rifampicina es sinergística in vitro, es uno de los regímenes preferidos